En perfectísimo estado y perfectamente funcional nos llega este clásico del fútbol español, la portada no puede ser más clara mostrándonos al protagonista del juego. Curiosamente en el centro comercial donde se compró hace tantos años tuvieron a bien poner el precio en plena portada y no se lo hemos quitado ni lo haremos, quede para el recuerdo el precio en esas entrañables pesetas.
Distribuido realizado por Topo Soft y con la colaboración de OCEAN, distribuida por ERBE, pisó la calle por primera vez hacia 1988. En un juego de fútbol con visión cenital al más puro estilo Tekhan World Cup, una clara referencia en mi opinión.
No nos gustan los juegos de fútbol, nos parecen cansinos y repetitivos, la añeja reiteración anual del producto que nos venden Konami y EA no hacen sino volver todo más vulgar si cabe, aunque el fútbol es sin duda el deporte Rey, el que mayores pasiones despierta en nuestro país. Emilio Butragueño fue uno de los jugadores más conocidos y populares no sólo de nuestro país sino del mundo y Topo Soft una de las compañías de software más prestigiosas de nuestro país y podemos decir con tranquilidad que no se necesitaba a Butragueño ni a ningún otro como gancho, divierte más que los juegos actuales.
Pero habría que decir que Emilio Butragueño Fútbol (EBF) en su momento entró innovando en los ordenadores de la época, para empezar, y como principal innovación presenta una perspectiva totalmente distinta a la utilizada con anterioridad. En lugar de la ya clásica en que podíamos observar el campo desde uno de sus laterales, en Emilio Butragueño Fútbol la perspectiva es aérea, es decir que contemplamos el campo tal y como si estuviéramos suspendidos a cierta altura sobre él. Esto supone entre otras cosas el que el tamaño del campo haya sido aumentado considerablemente, ya que en pantalla sólo observamos una pequeña porción de éste. Es cierto que existía Tekhan, pero no se podía jugar en sistemas domésticos.
También es innovador el hecho de que por primera vez cada equipo esté compuesto por once jugadores... Puede parecer una perogrullada, pero lo cierto es que si os fijáis, ninguno de los simuladores aparecidos con anterioridad respetaba algo tan elemental. Como tampoco respetaban el hecho de que se pudieran cometer faltas y de que hubiera un árbitro y unos linieres para sancionarlas; pues esto también lo incluye EBF, incluso incluye la posibilidad de que el árbitro muestre tarjetas a los jugadores, pudiendo incluso llegar a expulsarles.
Entre los elementos clásicos que podemos encontrar en está, como no, la posibilidad de escoger dos modalidades distintas de juego, bien un jugador contra el ordenador o bien dos jugadores uno contra otro. Podemos también definir nuestros propios controles o utilizar un joystick. En cuanto a los marcadores encontraremos desde un reloj que nos informará en todo momento de cuanto partido queda, a un marcador encargado de contabilizar los tantos de cada equipo, pasando por una reproducción en miniatura del campo -esto también era una novedad en su época- que nos muestra en todo momento en que zona de éste nos encontramos.
Y... con tanto hecho se olvidarón de cosas tan elementales como introducir un modo ligar o simplemente un modo torneo, e incluso cosas mucho más elementales como son alterar la duración del partido, cambiar el color de la camiseta, escoger las tácticas de juego de cada equipo, y sobre todo, y creemos que esto es prácticamente imperdonable, alterar la dificultad del juego, ya que si bien al principio este se mantiene lo suficientemente elevado como para complicamos en gran medida el intentar ganar un partido, una vez que consigamos hacernos con el programa y nuestro dominio del juego sea más elevado, se perderá en gran medida el interés al no responder el ordenador a nuestro nivel de juego.
En cuanto a los gráficos y a los movimientos, detalles ambos de suma importancia en un juego de estas características hay que decir que están francamente bien realizados, especialmente los segundos destacando por su calidad todo lo que se refiere a las rutinas de control del balón: el bote, el efecto de acercamiento y alejarniento del suelo, su sombra... También es de destacar el excelente scroll de pantalla que se produce rnientras nos movemos por el terreno de juego, tan suave y rápido como requerían las circunstancias.
El sonido es todo lo discreto que puede ser ya que sólo cuenta con dos melodias y ningún sonido FX, las melodías son concretamente de menú de juego y la de los partidos pero ambas son muy poco afortunadas.
Jugabilidad digna de un arcade, exigente pero rápida y divertida, sin complicaciones como la de los juegos de fútbol que nos gustan... como Soccer Brawl.
Acaba como empieza |
Curiosidades:
-Butragueño sale tanto en portada como en la pantalla de carga con una camiseta roja para no herir sesibilidades de nadie.
-Es el juego más vendido de la época de los 8 bits con 100.000 copias vendidas.
-Sólo la version de C64 y PC tienen los marcadores abajo.
-Junto con Michel Fútbol Master es el juego de deportes más representativo de nuestro pais en lo que a ordenadores de 8 bits se refiere.
-Tuvo una campaña publicitaria gigantesca y tan entrañable como esta:
Y con esto terminamos por hoy, muchas gracias como siempre al bueno de JAM, por sus increibles aportes.
Si queréis donar alguna consola, ordenador clásico, videojuegos o relacionados. Enviad un correo a donatuconsola@gmail.com y ya os comentamos como hacerlo.
Qué mítico juego y qué grande 'El Buitre'. Es sorprendente la sencillez con la que se realizaban algunos juegos de deportes en aquellos años tan memorables. Hasta la publicidad del juego me parece una obra de arte, pintada a mano.
ResponderEliminarUn saludo.
No puedo estar más de acuerdo, el juego adolece de muchas cosas, es verdad, pero en su sencillez y su diversión juega su mejor baza y lo hace genial.
EliminarCon tu comentario a la publicidad, voy a intentar poner algo de publicidad de los juegos que vayamos analizando, que siempre es curioso. Gracias por comentar