El juego tiene veintiocho añitos y aunque se conserva, tiene desperfectos en la carátula propios del uso, que debió de ser bastante, porque el juego está realmente bien.
Ignoro si traía instrucciones o no, pero si alguien las encuentra por casa y no sabe q hacer con ellas puede donarlas y nosotros se lo agradeceremos.
Epyx estuvo inspiradísima cuando en 1984 se decidió a lanzar Impossible Mission, saldría para otros sistemas y los analizaremos si alguna vez los adquirimos. Pero la versión original y genuina es de Commodore 64, y mientras escribo estas lineas estoy pensando en echarme otra partidilla.
Comenzamos nuestra misión dentro de los dominios del malvado doctor Atombender (dobla-átomos...¡toma ya!) en un ascensor, que usaremos para movernos por los pasillos y visitar todas las habitaciones de la fortaleza. En cuanto nuestro agente aparezca en pantalla el doctor nos dedicará unas palabras: “Another visitor. Stay awhile… staaaaay FOREVER!” todo ello perfectamente digitalizado y entendible.
Nuestro objetivo es revisar los muebles y objetos que se encuentren en cada una de las 32 salas que componen el juego, en busca de piezas del rompecabezas que nos hará ganar la partida. Siempre evitando que los robots guardianes nos toquen o nos destruyan con sus lasers.
En el juego sólo veremos dos tipos de enemigos, que os mostramos a continuación:
Los robots tienen comportamientos diferentes: Algunos tienen un patrón de movimiento fijo, otros nos persiguen, también pueden disparan rayos o solamente moverse, en todo caso cualquier roce con uno de ellos o sus armas es letal.
En nuestra incesante busqueda de piezas para el puzle, también podremos encontrar passwords que desde cualquier terminal de cualquier sala nos permita o bien desactivar los robots durante quince valiosos segundos o bien resetear los ascensores de esa sala.
Otro dato a resaltar es que en este juego nunca perdemos vidas, perdemos tiempo. Para completar nuestra misión imposible, tendremos seis horas y cada vez que nuestro personaje muere perdemos diez valiosos minutos. Recorrer treinta y dos salas, recogiendo todos los pedazos del puzle y luego montarlo puede parecer fácil pero hace honor al nombre del juego, aunque la verdad es que engancha lo suficiente como para volver a intentarlo teniendo más cuidado.
En las escenas de transición entre sala y sala, podremos acceder a un nuestro ordenador de bolsillo y empezar a montar los puzles -¡ah! que no lo he dicho-, son treinta y dos salas y por tanto cuatro puzles de ocho piezas, donde varia el color, además. Para ello también podremos llamar a la base para preguntar si tenemos todas las piezas y si lo estamos haciendo bien. Otra cosa que podemos hacer es ver como vamos de passwords.
Graficamente puede resultar algo sencillo, pero cumple de sobra con su cometido y las animaciones son fluidísimas y aunque no tenga fondos ni scroll, tampoco le hace falta.
El juego adolece de música y los únicos sonidos que tienen corresponden a los rayos de los robots, nuestras muertes y digitalizaciones de voz. Estas últimas clarísimas.
A nivel jugable es una pasada, es increible que con tres direcciones (izquierda y derecha para movernos y arriba para buscar) y botón para saltar, un juego permita hacer tanto y ser tan divertido. Una maravilla.
Curiosidades:
-Se hacen un montón de referencias a 007 en la contraportada:
IMPOSIBLE. Ha pasado mucho tiempo desde que la Agencia señálese una misión de esta forma. (Tiempo atrás, los agentes tenían números como 006 y 007). Pero la Agencia nunca se ha enfrentado a un adversario como el diabólicamente listo Elvin. Hasta ahora.
Su misión. Agente 4125. (Hemos perdido un Agente o dos desde 007) es anular el horrible complot de Elvin. Desde su laboratorio subterráneo, el nefasto científico está tomando a la población mundial como rehén bajo la amenaza de aniquilación nuclear.
-A pesar del nombre no cuenta con la licencia de la serie televisiva (recordemos que las películas no habían salido)
- Impossible Mission 2025 llego a salir para Amiga y PC e incluso se habló de su posible lanzamiento para Mega Drive y Super Nintendo, si bien estas dos últimas entregas jamás llegaron a ser comercializadas. Lo que no impide que mostremos lo que se planteaba:
Nos despedimos, no sin volver a dar las gracias otra vez a JAM.
Si queréis donar alguna consola, ordenador clásico, videojuegos o relacionados. Enviad un correo a donatuconsola@gmail.com y ya os comento como hacerlo.
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